Reseña: La balsa de piedra (133 de 365 + 1)

Lo que me gustó

Es un libro de Saramago y, como tal, tiene las usuales características que entretienen a los lectores de Saramago: Sardónicos comentarios políticos, personajes sin cara ni cuerpo pero profundísimas motivaciones, situaciones absurdas que se convierten en momentos reales y plausibles, etc. etc.

Mi conversación favorita fue la siguiente que reproduciré a continuación:

También, por supuesto, todos los episodios que se refieren a las acciones de las masas y de los políticos. Si algo sabe hacer Saramago es predecir el comportamiento de los dirigentes y de las grandes masas y por ello sus historias siempre suenan actuales y posibles, sin importar que el argumento dependa de un evento no sólo inverosímil sino además físicamente imposible.

Lo que no me gustó

Después de haber leído Ensayo sobre la ceguera, Ensayo sobre la lucidez, Las intermitencias de la muerte, Todos los nombres, El evangelio según Jesucristo, La caverna, Casi un objeto y Caín, leer La balsa de piedra es bastante decepcionante. No es que el libro sea malo, sino que no está al mismo nivel de las demás obras del autor.

¿Cuáles son sus problemas? En general, la historia de Pedro Orce, Joaquim Sassa, José Anaiço, Joana Carda, María Guavaira y el perro Constante es pésima (que me perdone Cervantes por decir esto de una historia de Saramago). Empieza bien, porque los fenómenos sobrenaturales conectados con los cinco personajes y los eventos que los unen al principio son entretenidos, pero en el desgaste de la historia resultan siendo también muestra de que el autor no supo qué hacer con ellos: José tiene estorninos que lo persiguen, pero dejan de hacerlo repentinamente; Joana tiene una vara de negrillo durante unos capítulos y luego a Saramago se le olvida que la tenía, de milagro la recuerda en el último capítulo; hay hilos de lana azules interminables que convenientemente se quedan guardados en un cuarto al que nadie regresa etc.

Ahora, las relaciones sentimentales entre los personajes son forzadas y sus interacciones son además irrelevantes: (Spoilers ahead) Las dos mujeres se acuestan con Pedro en un acto de supuesta misericordia que no solo no está motivado por ningún giro lógico del argumento (al leerlo se siente como: Y ahora quiero que Pedro se acueste con Joana y María porque sí) sino que al principio pareciera que el hecho va a tener consecuencias, ya que las dos mujeres resultan embarazadas (y no se sabe si es de Pedro o de los otros hombres del grupo), pero luego pareciera ser que no tiene mayor relevancia, puesto que todas las mujeres de la isla/península están embarazadas al mismo tiempo porque sí. Y no es que Saramago no viva de “porque sís”, el ensayo sobre la ceguera se sostiene en un “porque sí”, el lío es que, para esta novela, el exceso de los mismos (en general todo lo relacionado con los movimientos ultraoceánicos de la península y todos los fenómenos sobrenaturales de los personajes) parece más pereza que cualquier otra cosa.

Para cuando uno llega a la página 200, uno ya está aburrido de leer sobre los personajes y solamente quiere pasarles por encima a ver si se encuentra con el siguiente comentario político o relato sobre lo “macro” de la novela, que es lo verdaderamente interesante.

En conclusión

Si el libro fuera solo un ensayo sobre lo que pasaría con las grandes masas y los políticos en el mundo si la península ibérica se separara físicamente de Europa, el libro estaría perfecto. Así como está, sin embargo, le sobran al libro al menos 200 páginas de personajes con excelentes premisas, pero historias irrelevantes. Recomiendo de Saramago los otros que mencioné antes, pero este no.

Y por qué la gente no escucha música clásica IX: El mito del músico ignorante (131 de 365 + 1)

A la gente le gusta creer que la habilidad musical es una especie de poder mágico con el que se nace y que es totalmente imposible de entrenar. La noción, de hecho, está tan absurdamente enquistada en la cultura general, que es a menudo motivo de burla entre Tiktokers y YouTubers de música clásica que, con toda la razón, se sienten profundamente ofendidos cuando les dicen que los años que han pasado practicando y aprendiendo no significan absolutamente nada, puesto que al final todo fue producto del “talento”.

Ahora bien, los músicos pop, que saben su éxito depende de mantener vigentes los mitos que se construyen a su alrededor (ver entrada 130 al respecto de las notas agudas), viven de hacerle creer a las personas que no tienen ningún conocimiento técnico musical o el que tienen les viene “de oído” y es, lo que llaman ahora, “orgánico”. Sin embargo, basta ver un Tweets, y un vídeo de una película famosa y en breve uno se da cuenta de que no hay nada más alejado de la realidad.

Por ejemplo, el nueve de noviembre de 2021 McDonald’s cometió un error musical y Mariah Carey salió presta a corregirlos:

Al ver los comentarios se nota que casi nadie entendió que el Tweet de McDonald’s tiene las notas pertenecientes a All I Want for Christmas Is You y que McDonald’s colocó fa natural en vez de fa sostenido, de donde viene la corrección de la cantante. El asunto llamó la atención de Classic FM y de muchos músicos que descubrieron evidencia de que Mariah Carey poseer un conocimiento técnico musical, ya que solamente alguien con el suficiente entrenamiento podría leer esas letras, cantar una canción de ver letras (o nombres de notas, sí estuviera en español) y además notar el error.

Otro ejemplo. Al inicio de la película Let it Be, los Beatles están tocando juntos y Paul McCartney les está indicando con nombre propio todos los acordes que deben tocar y el momento exacto en que deben hacer el cambio de acorde para que armonicen correctamente la melodía que están tocando. Y todos los Beatles comprenden la indicación.

Porque, evidentemente, en su forma base, la música es la combinación entre melodías, ritmos y armonías que surgen tanto espontáneamente en la mente de un ser humano, como por imitación de los sonidos de la naturaleza, pero en el momento en que se vuelve necesario depender de algo distinto que la tradición oral para transmitir un conocimiento, ya sea a las siguientes generaciones o a los compañeros músicos de trabajo, la notación musical y los conceptos técnicos son la herramienta más adecuada para asegurarse de que el mensaje sea claro y una canción no desaparezca en la historia. Y por ello es obvio que todos los músicos, pop o clásicos, poseen un profundo entendimiento de las técnicas subyacentes de su arte y a menudo utilizan el mismo lenguaje para referirse a fenómenos similares.

No es magia, no es musa, es conocimiento y como tal hay que difundirlo.

El mito de las notas altas (130 de 365 + 1)

La canción de The Weekend, Save your Tears for Another Day, fue bastante popular en el 2020…

y su popularidad se extendió hasta el 2021, cuando Ariana Grande hizo una versión en dueto con el cantante canadiense.

El día que conocí la versión en dueto, a través de un vídeo de VEVO de YouTube donde los dos cantantes hacen una presentación en vivo, noté que la canción sonaba un poco más aguda de lo normal. Un semitono, para ser exactos (la original está en do mayor y la versión en vivo está en do sostenido mayor o si prefieren re bemol mayor).

Ahora bien, Ariana Grande, al igual que Mariah Carey, es reconocida por cantar notas agudas, y la mayoría de la gente suele asumir que cantar agudo y cantar bien son la misma cosa. En consecuencia, muchos habrán asumido que esta versión más aguda demuestra la habilidad de Ariana Grande, pero este acto demostraría los límites de su habilidad y que la técnica de The Weeknd es de hecho superior. ¿Por qué digo esto? Porque The Weeknd puede cantar su canción en dos tonalidades distintas y por ello demostrar un registro más amplio, mientras que Ariana necesita que adapten la canción a ella.

Ahora, estoy asumiendo algo incorrecto, creyendo que es decisión de los cantantes (y, pues, Ariana Grande ha demostrado sus habilidades para imitar voces y cantar en vivo en distintos videos de Saturday Night Live y YouTube), pero lo más probable es que algún productor dijo “más agudo, eso es lo que le gusta a la gente” y los dos cantantes sencillamente obedecieron.

Y se vuelve aburrido, que solo las voces extremas resultan valoradas como grandes voces y no sé revisen otros aspectos que son también relevantes a la hora de demostrar una gran técnica vocal. Piensen en Someone Like You, que en el coro tiene una sección aguda incantable que en la grabación del disco se nota que le está doliendo a Adele interpretar (y probablemente está “autotuneada”)

Afortunadamente, ella sabe y entiende los distintos aspectos asociados con cantar bien y en vivo jamás repite lo que suena en la grabación…

porque ella sabe que cantar fenomenal no depende de sonar como un silbato de piñata (con todo y que en esta versión desafina un poco, pero eso es arena de otro costal). Ojalá todos nos atreviéramos a entender eso también.

Sobre la autopista (129 de 365 + 1)

Algo pasó. La línea de carros se extiende interminable hasta los confines de la calle 200. Varios grupos de policías desvían el tráfico de un lado a otro y, en un borde de la calzada rápida, el camión de criminalística reposa como si nada. La gente toma fotos y discute.

Una vida se ha perdido, pero la mayoría de los medios reportan un trancón del que la muerte es solo una excusa válida para que la gente deje de quejarse por redes de lo imposible que está la autopista hacia el sur. El finado ni tiene nombre pero sí se sabe la placa de su moto.

Ya han pasado doce horas y el tránsito de la autopista discurre con normalidad. Olvidado él (o ella) como tantos otros y la gente al fin contenta del buen tráfico nocturno.

It’s just another day for you and me in paradise.

Recomendaciones en Netflix para pasar el tiempo sin pensar demasiado (128 de 365 + 1)

Rebel Moon

Es una de esas mega producciones que gasta millones de dólares en contratar actores medio famosos, un amplio grupo de animadores y cuando se da cuenta de que ya no le queda presupuesto, le pide a chat GPT que les haga un guión que combine todas las escenas y personajes de todas las películas de acción famosas de los últimos cien años.

¿El resultado? Los siete magníficos en el espacio.

Y no es una película de esas que vaya a hacer historia o que vaya a ser recordada más allá del tiempo que se demora uno en ver las dos partes. Pero si uno necesita hormiguitas peleando o ruido blanco que llaman ahora, estas dos películas son una muy buena opción para pasar el rato.

Oats Studios

Son, en sus propias palabras, cortos experimentales, y si uno los ve como historias independientes no sólo no los va a entender sino que probablemente se va a aburrir. No obstante, si uno lee la historia y se da cuenta de que los estrenaron en YouTube y en Steam antes de subirlos a Netflix, entonces se da cuenta de que realmente son lo que llaman en videojuegos “cutscenes” y que con esa idea en mente, son mucho más fáciles de disfrutar y uno que otro resulta hasta crítico y muy entretenido.

¿Mis favoritos? Zygote, God, los tres de ADAM y los dos de Kapture. Por cierto, para ver los tres de ADAM probablemente les va mejor en YouTube. Rakka y Firebase tienen excelentes animaciones. Los demás son pasables y, afortunadamente, son muy cortos, así que se puede salir de ellos casi que en dos días.

Over and out.

200 años (127 de 365 + 1)

Los profesores de música de los colegios saben que la melodía del cuarto movimiento de la novena sinfonía de Beethoven es exageradamente simple, a fin de cuentas está conformada por grados conjuntos (excepto por un salto de quinta por ahí, pero pues, los músicos me perdonarán que ignore ese salto por el propósito de este texto) y solamente utiliza las primeras cinco notas de la escala de re mayor ( y por eso mismo se puede transportar a cualquier tonalidad fácilmente, casi siempre do o sol mayor en las flautas dulces de colegio). Pero esto no es un accidente, ya que Beethoven deliberadamente diseñó una melodía simple para que, por un lado, fuera fácil de recordar y por el otro, representara el mensaje de unidad y hermandad para toda la humanidad que el compositor quería transmitir (idealmente todos cantando la misma canción que es fácil de cantar).

Ahora bien, sin ahondar demasiado en el asunto (porque ya está como tarde y tengo sueño) una de las curiosidades que más me agradan de este movimiento es la letra introductoria que luego de 6:00 de música orquestal (que incluyen también la famosa melodía) dice así:

O Freunde, nicht diese Töne! Sondern laßt uns angenehmere anstimmen,Und freuden vollere.

Que en resumen se podría entender como “con estos sonidos no, sino con los más alegres que vendrán a continuación”. Está introducción sucede justo antes de la canción que todos se saben, con una letra parecida a la de José Luis Rodríguez, y tiene sentido cuando se escucha el movimiento completo, puesto que los primeros seis minutos son, de algún modo, caóticos, y la voz humana, es la que invita a la tranquilidad y simplicidad que debería ser la paz humana.

Y uno escucha a Beethoven y por momentos siente que debería ser así de fácil y que, como dijo Bernstein (y parafraseo) tal vez todos seríamos un poco mejores personas si escucháramos y entendiéramos más la música de Beethoven:

Lunes (126 de 365 + 1)

Los juegos del New York Times son muy divertidos, sobre todo el nuevo, Strands, que tiene su propia fuente de pistas, para que uno no sienta que está haciendo trampa.

Es extraño como todos son expertos y mandan cartas repletas de su experticia. Luego toca responderles y se les responde y se demuestra que no saben nada, pero solo de nosotros dudan los expertos.

Gastroenteritis, mientras en el camino un rapaz roedor cruza la calle como si para él se hubiera detenido el motor. La señora y yo compartimos una mirada de incredulidad.

Sándwiches de jamón y queso con café.

El gato hace miau y le entiendo que tiene sed. El agua corre y yo corro con el agua.

Me tomo el último sorbo de café.

Leemos a Ballard porque está de gala y mientras que aquel pueblo por fin destroza a la nobleza, un nuevo pueblo se METe a un museo a disfrazarse de nobleza. Que el único lío de la nobleza es no ser parte de ella.

Se cae la noche.